Hace unas semanas viajé a San Francisco para asistir a un evento de criptomonedas (cryptocurrencies), pero más allá de hablar ahora de ese escabroso tema, quiero contar mi experiencia al utilizar #Turo. ¿Qué es Turo? Bueno, esta empresa es como el #Airbnb de los autos, así es, justo como lo estás pensando. Son personas como tú o como yo que registran su auto en la plataforma y cuando alguien viaja a ese destino busca los autos disponibles ¡y ya está! Hay una amplia variedad para elegir y rentar.
Así que me registré en la plataforma y después de buscar sobre una amplia variedad de autos, pasando por todo tipo de marcas top (Mercedes, Range Rover, Tesla, BMW, Jaguar, etc…), encontré esta joyita de auto: Aston Martin V8 rojo, convertible…
Así que apliqué para el auto y ¿qué creen que pasó?
¡Venga, dijo que sí! Estoy seguro de que mi foto de perfil le dio confianza a este pudiente y peculiar chavo, dueño del Aston Martin.
Así que ya estaba todo listo para dar un gran brinco después de andar en bicicleta en mis dos últimos viajes. Este vehículo sí que fue una gran evolución.
Al llegar al aeropuerto de SanFran SFO, envié el mensaje de texto para avisar que había llegado su gallo y que estaba listo para que pasaran por mí.
Enviaron un Lyft (competidor de UBER) para llevarme a donde tenían el Aston Martin.
Hay dos formas de que te entreguen el auto:
- Te citas con el dueño en algún lugar y ahí se hace la entrega.
- En algunos lugares tienen un estacionamiento con varios autos (me imagino que serán los de alta rotación) y ahí te llevan para hacer la entrega, como en mi caso.
Ahí un encargado de Turo.com te lleva para realizar la entrega y revisar los detalles que pueda tener el auto, ya que por ser tan delicados cualquier rayón puede ser motivo de una discusión, así que vale la pena dejarlo en claro antes.
Y los detalles que se encuentran quedan documentados en imágenes (las cuales serán enviadas a las dos partes, al dueño y a ti).
Después de este sencillo proceso, es momento de partir.
¡Qué gran experiencia!
Pero bueno, todo tiene su final, y regresar el auto es casi tan fácil como ir por él (lo difícil es desprenderte del Aston Martin). Al llegar al estacionamiento de Turo, una de las personas que trabajan ahí toma fotos de cómo lo entregaste, las cuales son enviadas a las dos partes vía correo electrónico.
Y si existiera algún problema por exceso de kilometraje, golpes o rayones, ni cómo decir que no (pero afortunadamente todo acabó sin problemas).
Bajo la perspectiva con la que me gusta evaluar este tipo de modelos de negocio y su correspondiente experiencia como usuario (CX), lo resumo en:
- Useful: Sí resuelve un problema de movilidad para quien quiere rentar un auto con una mayor variedad que las arrendadoras tradicionales, además de conseguir un mejor precio. Por cierto, Turo.com trabaja con una aseguradora, la cual al realizar la reserva se hace cargo de los daños.
- Usable: A través de la app o el sitio de Turo.com puedes inscribirte en la plataforma, sólo es cuestión de registrar una tarjeta de crédito y listo. Y como el modelo de negocio es muy similar a Airbnb, resulta muy sencillo entender el proceso.
- Delightful: La amplia variedad de autos y modelos que muy probablamente no encuentres con facilidad en las arrendadoras tradicionales es, desde mi perspectiva, lo que hace que esta plataforma sea la referencia del #airbnb de los autos. Además, al momento de entregarte el auto se aseguren de que quedes tranquilo y satisfecho con lo que te estás llevando, y no están buscando qué más venderte ni pretenden espantarte con seguros y ventas extras.
En fin, tiempo de un break.
Saludos desde SanFran.